MISMO IDIOMA. El hecho de que el idioma sea el mismo es la principal ventaja de este programa de movilidad. La facilidad que supone tener el mismo lenguaje para relacionarse, para comunicarte con la sociedad, para la universidad, para el ocio y para muchas cosas más implica tener que despreocuparse por cómo se dice una palabra o por cómo contar una anécdota, por saber cuanto tengo que pagar, por saber si he pedido bien la comida y un sin fin de trabas que surgen cuando te vas al extranjero (existe el traductor. Ok. Pero no todo puede contarse a punta de teclado).
AMISTADES ESPAÑOLAS. Otra ventaja es que casi todas las amistades -por no decir todas- serán españolas. Esto supone una mayor facilidad para verlas cuando acabe la experiencia y todo lo que venga después (parejas incluidas). Además, el hecho de tener una casa en varias partes de España donde puedas quedarte es un puntazo.
SISTEMA SANITARIO. Posiblemente esto no nos interese mucho o no sea algo por lo que nos guiaríamos para decidir si Erasmus o SICUE, pero te aseguro que tus padres sí. Este pro significa que no vas a tener que estar pendiente de hacerte la tarjeta sanitaria europea (sí, esa que caduca a los dos días de hacerla como quien dice). Simplemente tendrás que trasladar tu expediente si eres de la Seguridad Social o si por el contrario dispones de un seguro privado, no tendrás que hacer absolutamente nada.
CURSAR ASIGNATURAS QUE PUEDEN SER INTERESANTES Y NO SE ENCUENTRAN EN TU PLAN DE ESTUDIOS. Este aspecto puede no tener importancia mientras te decides qué hacer al año que viene, pero una vez te decidas a hacer el SICUE te darás cuenta que al tener que elegir tú el plan de estudios, el cual te haces a tu medida, ves que puedes escoger las asignaturas que más te interesen.
